De matices, make off y quintaesencia entre confortabilidad Vs comodidad o ajo negro Vs ajo blanco
Todos mis cumpleaños pido un deseo . Pues bien este año me pedí un regalo de cumpleaños inusual, pero es que estar tan cerca de los cincuenta te va inspirando y cada vez pides con mas sensatez. Se trata de mi deseo de ser una persona plenamente satisfecha. Supongo que al ver que pedir mas comodidad, creyendo hallar en ella la causa de mi satisfacción, no funcionaba. (ya que lo que al principio parece más cómodo no siempre resulta serlo), decidí pedir su efecto en lugar de la causa, osea la satisfacción que se sentiría al poseer todas las comodidades del mundo.
El resultado es paradójico para la mente analítica pero muy evidente para el pensamiento divergente. Y es que he empezado a encontrar efectos de ese deseo, en detalles muy pequeños, diría que casi en actitudes nuevas, sobre todo en cosas que parezco descubrir y que antes he obviado o evitado ver.
Como cuando ves una película que piensas que te esta contando la única perspectiva que existe y luego ves el make off y las perspectivas aumentan a la del cámara, actores, etc. Pues en la vida ese make off te incluye a ti y al cómo tu ves la cosas.
Por ejemplo la satisfacción de encontrar los matices que existen entre vivir confortablemente que es una cosa y cómodamente que es otra muy distinta.
No debemos confundirse "confort" cuando hablamos de una casa o un coche o bien material en general, con la palabra "confortar" (procedente del latín confortāre), que significa "dar vigor, espíritu y fuerza"; "animar, alentar, consolar al afligido" y que llena el alma o lo más profundo de nuestra carcasa diría yo.
Como me recuerda esto a la historia de amor que narra La La Land, ¿adivina quién de los dos escoge confort y quien comodidad difícil verdad? Por ello, te invito a explorar este matiz y descubrir la versión sutil de la palabra confort, tantas veces usada como sinónimo de comodidad y buscada de forma material para conseguir una vida confortable o cómoda. Y poder encontrar una versión de confort que nos eleve a sentirnos reconfortados en la experiencia de la vida, mas allá de lo material y que sucede instante a instante en un espacio tiempo que no siempre es cómodo, pero que podemos vivir y experimentar desde el aliento o fuerza que contenemos en nuestra consciencia.
Pues bien, en esos menesteres me encuentro yo mientras trato de poner confort a mi existencia más allá de los bienes materiales. Me siento como un ajo negro en plena fermentación cerebral, buscando la quintaesencia de su sutileza, personaje gastronómico que por cierto quiero presentaros hoy.
El ajo negro se obtiene mediante un proceso de fermentación del ajo fresco común, sin añadir ningún tipo aditivo. A diferencia del blanco, durante el proceso de fermentación que le otorga un color negro , se produce también una perdida del intenso olor a ajo en una cantidad superior al 90%. Su olor es más sutil, pero también su textura y sabor, es la quintaesencia del ajo.
Sus propiedades son múltiples entre otras ayuda al sistema inmunológico del cuerpo, es antibiótico, antiséptico, fungicida y bactericida. Mejora el ajuste de la presión arterial, azúcar en la sangre, niveles de lípidos y de colesterol. Ayuda a la eliminación de radicales libres, 10 veces más que el ajo fresco.Es un potente anticancerígeno. Es un sedante especial para los nervios.Es bueno para el asma y los problemas respiratorios. Cura el insomnio y el estreñimiento. Aumenta la resistencia física y retrasa el envejecimiento. Ayuda en la recuperación de los estados de debilidad.
Y como receta quiero daros una sencilla sugerencia de uso, añadir dos o tres dientes de ajo negro a cualquier mayonesa que preparéis y tendréis un alioli negro que os combinará especialmente con sabores de mar, langostinos, pescados y verduras a la plancha. No dejeis de probarlo ya que os reconfortará el alma.